sábado, 30 de marzo de 2013

La lluvia altera el desarrollo de las hermandades del Viernes Santo.

La aparición de la lluvia tuvo su relevancia en el devenir de las hermandades del Viernes Santo ya que o bien tuvieron que acortar su recorrido para evitar el agua (Valle), o bien tuvieron que resguardarse al ser sorprendidos en plena salida procesional, tal y como ocurriera con Expiración y Santo Entierro.